La magia de los aromas

Los aromas son una verdadera magia, porque despiertan nuestros sentidos.

Son capaces de despertar inspiración y energía creativa, dar un impulso poderoso, encender la pasión o, por el contrario, pueden adormecer suavemente, dar paz y tranquilidad, trasladarnos a través del espacio tiempo.

Afortunadamente, los tiempos en que para perfumar la casa había que recurrir a agresivos aromas artificiales han pasado al olvido. Ya no hace falta colgar falsos pinos de cartón. Existen alternativas mucho más delicadas y agradables para dar un ambiente cálido y agradable a sus estancias, como nuestros saquitos aromáticos, que pueden ser la nota más exquisita de un ambiente, e incluso influir sobre el estado de ánimo de forma positiva.

Existen aromas relajantes como la lavanda, que potencia el bienestar general y mejora los estados de ansiedad. También pueden ayudar a conciliar el sueño. Otros medicinales como el eucalipto, que descongestiona las vías respiratorias y combate resfriados. Sensuales como la rosa, que además de potenciar una sensación de bienestar, es un gran afrodisíaco. También hay aromas que nos evocan ciertas épocas, como la Navidad, el jengibre o la canela son los más apropiados para ello.

Hay otros que provocan una especie de alegría, energía y buen humor, como los frutales o cítricos, ideales para lugares de trabajo. Los aromas como el algodón o cedro nos hacen sentir un ambiente limpio y refrescante. Otros aromas dulces, como la vainilla, galleta o incluso el coco, nos dan sensación de bienestar.

¿Cuál es el tuyo?